
Escuchar a Lennon me transporta a otra época y me hace revivir nostalgias que se aprietan en la garganta y hacen llorar, con una mezcla de alegría y de tristeza, de añoranza de tantas cosas que se fueron y nos pasaron de largo.
La magia de la música nos lleva a lugares recónditos y revive en nosotros las mismas sensaciones en la piel y el mismo olor a sueños de antes.
Y resurgen las preguntas de siempre: ¿A dónde se fueron? ¿Qué pasó a lo largo de nuestras vidas?
Ésta es otra historia. Con los mismos personajes, pero distinta; inesperadamente distinta.
Es una historia imprevista e irremediable.